Wow, another year went by! And here we are again doing some retrospective.
I know this is a cheap way to avoid visiting a psychologist but somehow, writing these posts helps me create piece of mind. And many people have told me they like reading them so it´s a win-win situation!
I started the year with a new role: Automation Team Lead at Wonga.
Wonga is a financial services organisation with presence in multiple countries, operating in a heavily regulated environment and this involves a lot of challenges in terms of automation.
Ah… the summertime! Lots of feet in the sand pictures, people showing off in Facebook, extreme unbearable heat and most importantly… holidays time for many people!
And of course, everybody thinks about quitting their shitty jobs during holidays so many chances are you will do some interviews between the 15th of August and the 15th of September as it is the perfect time for companies to hire and it is possibly the time of the year when people are more likely to consider a job change.
After some years working in startups I thought it was about time to write a blog post with some thoughts and experiences related to the stock options you sometimes get in this type of companies.
When I was in Barcelona I often thought about how great it would be if more companies offered stock options. But this thought has changed lately and I would like to explain why.
Most of this is just plain common sense and some of you may say “hey, this is very clear in the contract, you should know what you are signing” but the reality is that most of us don´t know much about these things and only experience teaches us.
Here we are again, another year has passed and it´s time for retrospective!
This year has been a bit weird for me. A year of reinvention, regeneration and most importantly, making peace with myself. Most of it has happened at a personal level but it has also affected my work.
I have spent all year working at Another Place Productions, a small video game studio in London where I have been able to improve my DevOps knowledge a lot as I was in charge of all the backend and infrastructure.
En el momento de escribir esto, hace algo más de 2 años que aterricé en esta fascinante ciudad en busca de un futuro mejor para mí y mi mujer. Han pasado una infinidad de cosas desde entonces y creo que es un buen momento para hacer balance. Y en vez de pagar una sesión de psicólogo, he decidido escribir un poco al respecto.
He pensado escribir este post en castellano ya que aunque la mayoría de los que me leéis entendéis perfectamente mi incorrecto inglés quiero pensar que esto puede servir a gente indecisa cuyo nivel de inglés quizás no sea muy bueno.
It’s been quite a while since I last wrote an entry in this blog. What the hell, I haven’t written a single blog post in 2014! And this is a shame. A clear resolution for 2015 is to try to write a bit more here.
Anyway, sorry for another (hopefully not) boring retrospective post. But it’s been a very complex and intense year for me and I really want to write about it.
2012 fue un año muy intenso pero 2013 tampoco se ha quedado atrás
La gran decisión Empecé el año todavía en SocialPoint. Probablemente la aplicación más grande de Symfony y uno de los proyectos más importantes de Europa sin ninguna duda. Rodeado de buenos amigos, excelentes ingenieros, pero algo cansado del ritmo frenético de los meses anteriores. Y ya llevaba unos meses dándole vueltas a la posibilidad de marcharme fuera.
Este post no va de tecnología, o por lo menos no va a haber código. Sin embargo, voy a intentar resumir algunas experiencias que he tenido en mis primeros 4 meses en Londres. Tal vez con eso consiga animar (o incluso desanimar, y quizás ahorraros algo de sufrimiento) a todos aquellos que os estéis planteando dar el salto.
Todo viene de unos tweets cruzados con los grandes @asiermarques y @pgodel así que ya sabéis a quién culpar!
Si 2011 fue movido, 2012 ha sido una auténtica locura.
Resumen Laboral Empecé el año en Ulabox, posiblemente el proyecto web del cual me siento más orgulloso, terminando una larga migración del infame Prestashop a un backend 100% Symfony2. Todo parecía ir bien, pero la crisis no perdona ni a los mejores y el proyecto tuvo una época muy dura con fuertes recortes de personal. Fueron momentos complicados ya que como sabréis todos los que habéis estado en una startup, acabas sintiendo que el proyecto es como un pequeño hijito y creedme que fue muy duro tenerlo que dejar.
Hace poco más de 3 meses que hacía mi propia retrospectiva sobre el pasado año 2011. Y la verdad es que desde entonces han sucedido un montón de cosas sobre las cuales me apetece escribir un poco.
Desde aquel post, ha cambiado totalmente mi situación a nivel laboral y ya he conseguido cumplir alguno de los objetivos que me había propuesto para este 2012.
Para empezar, la comunidad Symfony Barcelona ya es una realidad.